SANTO DOMINGO. – La Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA) fue apoderada este lunes de una denuncia formalizada en contra del exadministrador del Laboratorio Químico Dominicano (Laboquidom), Mauricio Espinosa, por supuestamente desviar y manejar irregularmente alrededor de RD$200 millones de pesos en ocho años de gestión.
La denuncia fue presentada por el abogado Jorge Lora Castillo, quien actuó y habló en representación del actual administrador del laboratorio público-privado, Nicolás Polanco. Al salir de la Procuraduría el abogado explicó que deposita la denuncia en el Ministerio Público porque el 51% del capital financiero del laboratorio es de origen estatal.
Según el abogado, cuando las nuevas autoridades comandadas por el presidente Luis Abinader tomaron el control del laboratorio, hicieron auditorías y determinaron que existen irregularidades financieras y desvíos de inventarios y mercancías que ascienden los RD$200 millones de pesos.
En ese sentido, Lora Castillo también pidió que la Cámara de Cuentas se apersone en el laboratorio para que realice una auditoría externa y pueda constatar de primera mano las acusaciones que lanzaron las actuales autoridades.
Asimismo, el abogado sostuvo que el supuesto modus operandi del antiguo administrador era desviar mercancías elaboradas en Laboquidom hacia un laboratorio simultáneo de medicinas que es presuntamente de su propiedad.
También, refirió que producto de la pandemia el laboratorio creó aproximadamente 24 mil frascos de desinfectante de manos que supuestamente nunca aparecieron en los inventarios porque, a decir del abogado, fueron desviados hacia las empresas privadas del entonces administrador del laboratorio.
En la denuncia depositada ante el Ministerio Público se señala a Espinosa de manejar su empresa privada como si fuera una compañía de accionistas y se le acusa de alegadamente utilizar los recursos públicos de Laboquidom “para su particular beneficio”.
Indica el documento que durante la gestión de Espinosa supuestamente fueron realizados pagos sin soportes, recepción de cobros sin registros contables y violación de todos los procedimientos internos de control. También, se puntualiza que el exfuncionario presuntamente pagaba a sus empleados particulares con los recursos del laboratorio público-privado.
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